Amigas y amigos: Termina un año en el hemos vivido muchas cosas; unas bonitas y otras difíciles. Pero vale la pena reconocer lo mucho que Dios nos ha ayudado y agradecérselo, y también agradecer a la familia y a los que nos han echado la mano. Y ahora que comienza 2019, sería muy bueno proponernos tomarnos de la mano de Dios y echarle ganas para mejorar nuestra vida y ayudar a que las cosas mejoren en casa y en nuestra sociedad. No esperemos a que todo sea ideal para decidirnos a hacerlo; lo que suceda y lo que los demás hagan no está en nuestras manos, pero sí lo que nosotros decidamos hacer. Siendo comprensivos, justos, serviciales, pacientes, perdonando y pidiendo perdón haremos realidad aquello que todos nos deseamos al iniciar este 2019: ¡feliz año nuevo! +Eugenio Lira Rugarcía Obispo de Matamoros
PERIODICO DE LA DIOCESIS DE MATAMOROS